Guerreros
Guerreros
Desde su debut en 1995, con Salto al vacío, el cineasta vasco Daniel Calparsoro ha sido muy discutido por la crítica, sobre todo por el tono artificiosamente violento, cortante y nihilista de su estilo. Tampoco el público respaldó sus siguientes películas: Pasajes, A ciegas y Asfalto. Ahora podría ganarse a unos y otros con Guerreros. Se trata de una recreación durísima pero suficientemente matizada de las tragedias que viven las fuerzas internacionales de pacificación desplegadas en Kosovo.
Generación perdida
Light It Up
Judd Nelson encarna a Ken Knowles, profesor en un triste instituto de Nueva York, al que acuden estudiantes de las clases más bajas de la sociedad. Sus alumnos le aprecian y al verlo inexplicablemente suspendido de empleo y sueldo inician una protesta que culminará en un encierro, con toma de rehén, policía y despliegue de los medios informativos.
Una más dentro de la serie de películas sobre aulas conflictivas, con la particularidad de que el director se centra más en describir el lamentable estado de una parte del sistema educativo norteamericano que en la parte de acción, casi un thriller urbano, con que inicia la historia. F.G.-D.
Grass. Marihuana
Grass
Documental que describe cincuenta años de la lucha contra la droga en Estados Unidos, desde 1930 hasta 1980. Ron Mann ha utilizado material oficial, principalmente de las campañas del gobierno estadounidense para erradicar la droga. El resultado es tristemente cómico. Se gastaron miles de millones de dólares y el número de consumidores pasó de 60.000 a 30 millones.
George de la Jungla
George of the Jungle
No es —como podría parecer— la típica comedieta para niños, sino una frívola memez para adultos; una parodia de Tarzán, convertido aquí en un zoquete integral, especializado en chocar con los árboles y en exhibir groseramente su musculatura. Interpreta al héroe el joven actor Brendan Fraser, que demuestra una asombrosa falta del sentido del ridículo; y dirige torpemente el engendro Sam Weisman (Vuelven los mejores). El film ha recaudado en Estados Unidos más de 100 millones de dólares. Otro síntoma de lo bajo que está el nivel. J.J.M.
Gato negro, gato blanco
Chat Noir, Chat Blanc
En las películas de Kusturica, llama la atención la fuerte presencia de animales. Aquí aparecen incluso en el título; efectivamente, el gato negro y el gato blanco salen una y otra vez a escena; pero ese nombre tiene también un sentido figurado: los pícaros Matko y Dadan –vestidos, en una fiesta, el uno de traje negro, el otro de traje blanco– están continuamente jugando al ratón y al gato.